Reme Rico, l’art c’est l’azur… en sus fotografías

Cuando siempre me han preguntado cuál es mi color favorito, no he podido decir uno: el rojo y el azul o el azul y el rojo. Debe ser porque tengo una dualidad entre lo pasional que puedo llegar a ser y lo serena que me comporto en otras ocasiones. Así que cuando Reme Rico me explicó cómo sería la sesión, estaba emocionada por explorar una parte de mi esencia.

Llevábamos meses intentado coincidir, sobre todo las últimas semanas porque entre trabajo y lluvia inesperada, alargábamos el proceso. Pero llegó el día y surgió el arte en su serie de fotografías “Azul”.

Yo sólo me dejé llevar. Hice caso a sus indicaciones y disfruté del momento para crear sensaciones desde la belleza de la naturaleza, los colores y la mirada de esta gran fotógrafa malagueña.

Nació en Málaga en 1971. Fue su marido, Juan José Jiménez, fotógrafo también, quien indiscutiblemente, le abrió la puerta de entrada al mundo de la fotografía. Reme Rico acumula una experiencia de casi 20 años trabajando en la fotografía, pero hasta 2015 no empezó a mirar y a sentir este mundo de una forma diferente. Siempre le gustó dibujar y descubrió que con este tipo de fotografías puede crear y plasmar todas esas imágenes que se forman en su interior. Participó en una exposición colectiva “Chapter One” en el Photofestival 2015 de Málaga. Esta exposición le llevó a otra en Mijas y Estepona.

Así, de manera silenciosa y tímida, con su dulzura, ha ido mostrando su particular visión de emociones,  de sensaciones a través de su forma de capturar la vida en instantáneas. ¿Son preciosas, verdad?

En “Azul” Reme Rico decidió utilizar una red de pescadores. Sí, ¡estoy envuelta en una red! ¿A que es maravilloso? Me pinté los ojos de azul, con pestañas incluidas, pelo liso suelto y a volar con la imaginación en algún punto entre Coín y Alhaurín, en pleno campo al atardecer. Ahí estuvimos entre árboles donde habita la fantasía.

L’art c’est l’azur 

En muchas culturas, junto al violeta, el azul está asociado a la fantasía y a las ideas utópicas. Las personas hablan de “príncipes azules”, como una manera de decir que las cualidades y características con las cuales se describe a ese tipo de personajes, son imposibles de alcanzar en la vida real. Por eso los príncipes azules son personajes fantásticos.

En otras, el azul es el color de lo divino; ya que se asocian a los dioses con el cielo azulado, que consideran su morada. Debido a este detalle, también se le relaciona con lo eterno porque las cosas que nos parecen infinitas y grandes, como el mar y el cielo,  son de este color.

Así que esa tarde unimos lo eterno, lo fantástico, lo inmenso con la fotografía para crear. Disfruté muchísimo de la sesión y espero formar parte de más con Reme para seguir jugando, creando y expresando. Si os gusta, podéis seguir su trabajo pinchando aquí.

Como dicen en francés cuando muestran su asombro “j’en reste bleu” o  “¡parbleu!”, cuando resulta algo  fantástico y difícil de explicar… Todo eso y mucho más es Reme Rico. Gracias por tu arte.

Love Málaga