Gracias por todo lo aprendido, amigo
Gracias por todo lo aprendido, amigo.
No sé qué decirte. Qué agradecerte o reprocharte. Aunque llegados a este punto es lo que toca, ¿no?
Tú sabes que soy más bien de pasar página, quedarme con lo bueno y olvidar. Porque en mi corazón hay mucho sitio pero lo vacío tan pronto como lo lleno, si lo que siento no me hace bien.
Yo, a esto lo llamo vivir.
Sin embargo, si quieres que te explique algo, sí que he aprendido mucho de ti: me has hecho sentir cosas maravillosas, compartir experiencias increíbles y afrontar experiencias muy enriquecedoras. Y tengo que reconocerlo, has sido un reto para mí.
Tú te convertiste en un espejo en el que ver el reflejo de mis miedos, mis dudas y mis fortalezas. Me has hecho crecer. Sé que lo sabes.
Y lo más importante… me has enseñado a amar más y mejor.
No obstante, han habido momentos en los que nada te comprendía. Y ahí tuve que alejarme de ti. Dejar que todo fluyera y se asentara por sí mismo.
¡Yo, dejar que todo pase y tener paciencia! ¡Quién me ha visto y quién me ve!
Esto y todo ha sido gracias a ti… Querido 2018.
Así que gracias por todos tus segundos. Los dulces y los amargos. Por las caricias y los arañazos. Por los «no puedo» superados. Gracias de corazón.
Te seré sincera, quizás no te eche de menos, pero siempre tendrás un hueco especial en mi biografía.
Buena suerte, amigo. Ahora asume que nos separamos. Déjame saltar otra vez al vacío y conocer a un… nuevo año.
Bienvenido, 2019.
Encantada de conocerte.
Carmen Moreno, Love Málaga
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!