Ni las bicicletas ni las cervezas son exclusivas para el verano. ¿A quién no le apetece en este otoño de calor una cerveza bien fría con su correspondiente punto de amargor para brindar por la vida o porque haces una parada en el día? Recomendando tomarla con moderación, (no me malinterpretéis y digáis que os estoy incitando al consumo de alcohol) sabemos sus muchas propiedades alimenticias que no voy a describir porque no es el caso.
Hoy “he venido a hablar de mi libro”, como diría Umbral. He venido a acercar esta marca malagueña La Ola, una cerveza malagueña, que surgía en 2014, como nacen los grandes proyectos: por una pequeña idea llena de ilusión y cuidado.
Y es que La Ola se crea en Las Lagunas, Mijas Costa en un pequeño local, como el sueño americano. En este caso mijeño, donde Daniel y Tony han invertido no sólo paciencia y dedicación. Hay una apuesta económica importante para producir de manera totalmente artesanal esta cerveza con mucho cuerpo y con una tirada limitada que la hace exclusiva. De momento son la única fábrica desde Marbella hasta Alhaurín.
“Todo surge hace más de tres años cuando la inquietud de Dani, le provocó experimentar en este campo. Y ya me inicié yo también. Al probarla me di cuenta que no tenía nada que ver con la comercial. Así montamos los primeros bártulos en la terraza de mi piso y elaboramos unos veinte litros. De ahí, salieron recetas gracias a la habilidad y el talento que tiene Dani para detectar los sabores y conseguimos el gusto que queríamos tener. Y nada…, decidimos montar la empresa”, explica Tony.
Algo que no es fácil. “Para nosotros es como un hijo, una creación a la que hay que dedicar mucho mimo y cuidado”, añade. Y es que esta cerveza malagueña es fruto de meses de lectura de libros, investigaciones en Internet y muchas horas de ensayos.
Los ingredientes son la base… Sobre todo agua de Mijas. Sin aditivos, sin colorantes ni conservantes. Sin filtrar y sin carbónico añadido. «Simplemente» agua, lúpulo, malta de cebada y levadura. Por ello es considerada cerveza ecológica y natural. Tsunami, el primer tipo que han elaborado es una IPA con 8% vol (cuidado que es fuerte).
¿Por qué La Ola? Pues el nombre llega porque ambas son algo líquido, tienen espuma, están en Mijas, en la costa. Y Tsunami, que es el nombre del primer tipo de esta marca, porque es una cerveza potente, fuerte como un tsunami. ¡Ojo! Vendrán nuevos, algo más suave para otro público.
Desde esta pequeña fábrica en Las Lagunas realizan los diferentes pasos en el procedimiento de elaboración: hacen la cerveza, fermentan dependiendo del tipo (puede rondar un par de semanas) y terminan con el embotellado (donde pasará una segunda fermentación) y etiquetado. ¡Todo a mano! ¡Imaginaos cien litros a mano! Pues así lo hacen. Tras dos meses, desde calle río Benamargosa salen listos para beber los cien litros de cerveza malagueña La Ola. Todo está hecho a mano hasta el diseño del etiquetado, muy cuidado, original de Antonio Valenzuela.
De ella, sus creadores destacan el aroma, el color oscuro por su gran cantidad de Malta, el amargor en el paladar y el toque afrutado en nariz y en el sabor por el lúpulo que tiene. “Cuando hicimos la cerveza, queríamos que al terminarla, te acordaras de ella y que quisieras repetir”, nos cuenta Daniel. Ah, una recomendación: tomadla más para comer que para tapear.
Si queréis probar esta cerveza malagueña cien por cien natural es muy fácil. Podéis hacerlo en este enlace para beberla en botella o de barril. También a través de la web podéis hacer el pedido y recoger en la fábrica en Mijas.
¿A que no esperabais este producto tan exclusivo hecho en Málaga? ¿Habéis probado la cerveza La Ola? ¿A qué esperáis?
Dejadme comentarios.
Love Málaga