En el día de Andalucía tenía que hacer coincidir la entrada en el blog del intenso sábado flamenco que viví la semana pasada. Y es que en el sur, no es topicazo, pero quién más, quién menos algo de flamequito lleva en las venas. Aunque sea por disfrutarlo a través de la música, de la gastronomía; con la pintura o con la moda. Por eso, hoy para celebrar nuestro 28 de febrero os hablo de mi paso por el FIMAF la “Feria Internacional de Moda Flamenca en Málaga” que se celebró en un recinto maravilloso como es el Museo Automovilístico y de la Moda de Málaga el 24 y 25 de febrero.
Os tengo que decir que lucir un traje de flamenca y todos sus complementos, te cambia la actitud. Es fundarte uno de ellos, ver marcadas tus curvas y potenciados tus rasgos con las flores, collares o peinetas, y… la vida se ve de otra manera. No es broma, os lo prometo. Porque hay mucho de alegría, de luz en estos diseños. Si no haced un día la prueba. Además son tan bellos los diseños y tejidos porque cada año se adaptan a las tendencias de la temporada.
Y eso es lo que ha desprendido precisamente el FIMAF de Málaga que por tercer año consecutivo ha apostado por convertirse en un escaparate para diseñadores y creadores malagueños así como de toda Andalucía. El objetivo: promocionar el sector de la industria del flamenco. Y vaya si lo ha conseguido porque de nuevo más de 5000 personas han visitado este evento en plena Costa del Sol.
El FIMAF contó con una pasarela de moda para desfiles y una zona de exposiciones con diferentes marcas organizado por Nueva Moda Producciones y Makyre Eventos y contando con la colaboración de entre otros, Málaga de Moda.
Yo pude asistir a la jornada del sábado del FIMAF. Tenía mucho interés en disfrutar de las propuestas de los jóvenes diseñadores para apoyar el talento emergente. Y me sorprendí muchísimo con los modelos que se vieron gracias al concurso organizado por Cafés Santa Crisitina “Diseñadores Noveles de Moda Flamenca Cafés Santa Cristina». Una oportunidad para estos creadores que comienzan y que pueden demostrar su creatividad elaborando dos vestidos de flamenca. Tan sólo tenían que utilizar los colores verde, rojo y amarillo y dejar volar su imaginación.
Los finalistas fueron Carmen Gallardo y Jote Martínez y la ganadora Celia Pergáz que será la encargada de diseñar los 10 vestidos de flamenca que con motivo de la Feria de Málaga, Cafés Santa Cristina sorteará entre sus clientes.
Y tras el desfile disfruté también como una niña parándome en cada uno de los stands que han formado el FIMAF 2018. Y me probé algunas cosas. Como estos pendientes elaborados de manera artesanal de Beatriz Barrera que cada pieza es única. Y muy importante… pesan muy poco. A qué eso os gusta?
Y también me probé algunas flores. A mí me encanta llevar sombreros, pañuelos y flores incluso en mi día a día. Por eso encontrar este stand con ramilletes de todos los tipos y colores fue una gozada.
Grandes firmas y nombres han acudido a FIMAF 2018: Pilar Vera, Carmen Cañaver, Melisa Lozano, Pilar Arregui, entre muchos otros. Nos han dejado un torbellino de colores y tejidos muy variados para todos los gustos.
Por todo esto se puede decir que Málaga, entre volantes y volantes, ya se ha consolidado con este evento entre los salones más destacados andaluces.
El flamenco siguió por la noche
Para rematar mi día flamenco y andaluz, asistí a la presentación del último libreto del cordobés Francis Arroyo, artista plástico, crítico, músico y escritor que traía hasta la Sala Malakarte sus Improvisaciones IX con la colaboración del actor malagueño Paco Roma. Después de meses hablando por redes pude conocer a Paco y os aseguro que es una de esas personas auténticas (que por desgracia escasean) que luchan por ideales.
Y para finalizar también apoyé el lanzamiento oficial del medio digital “Pellizco flamenco” de Francisco Reina en la Peña Unión del Cante.
Como veis un día flamenco desde el FIMAF hasta el cierre. Pero decidme, ¿hay algo mejor que compartir con buena gente sus sueños? Para mí, no. ¿Qué pensáis vosotros?
Un abrazo familia.
¿Queréis verme de flamenca? Pues pincha aquí para leer una entrada maravillosa.
Carmen Moreno